Paisajes de ensueño en la punta del bolígrafo: Kevin Lucbert para «What’s in a lamp?»
Descubre el poder de los sueños en el arte surrealista de Kevin Lucbert, que da vida a las lámparas Foscarini en la nueva colaboración para el proyecto «What’s in a lamp?». Se trata de un proyecto editorial que transforma el feed de Instagram de @foscarinilamps en una galería virtual con obras de artistas conocidos o emergentes del panorama internacional.
Utilizando un simple bolígrafo, Kevin Lucbert da vida a escenarios suspendidos entre lo familiar y lo desconocido. Su estilo inconfundible, que supera las fronteras entre escritura, dibujo y pintura, consigue que la gente explore sus propios sueños y empiece a garabatear. Toma un objeto cotidiano como un bolígrafo, lo reinventa y lo transforma en una herramienta para la libre expresión creativa.
Kevin Lucbert, autodenominado «franco-berlinés», se graduó en la Escuela Nacional de Artes Decorativas de París en 2008 y ahora vive entre Berlín y París como miembro de The Ensaders, un colectivo de artistas activo en la realización de performance, exposiciones y talleres de dibujo.
Su creatividad se basa en el poder de soñar y luego llevar el sueño a la realidad. Traspasando los límites de la conciencia, crea mundos misteriosos que integran de forma armoniosa elementos naturales como el sol, el agua, la tierra y el cielo. Esta sugerente combinación es capaz de confundir la percepción de la realidad e invita a emprender un viaje imaginativo fascinante a través del espacio y el tiempo. Con sus trazos de bolígrafo, el artista se convierte en nuestro guía visionario, mientras nos sumergimos en su universo vibrante y místico.
En su serie para el proyecto «What’s in a Lamp?» de Foscarini, Kevin Lucbert ha explorado la colección de lámparas Foscarini, dejando volar su imaginación. El resultado son escenarios surrealistas impregnados con su inconfundible estilo. Sumergíos en los abismos del mar y encontraréis fascinantes medusas Chouchin e insólitos peces linterna y delante las Twiggy iluminadas que os muestran el camino; o contemplad el cielo mirando a través de la lámpara de mesa Nile que, transformada en un telescopio gigante orientado hacia la luna, se convierte en un portal para el universo y la bóveda celeste.
Descubre por ti mismo la magia de Kevin Lucbert y déjate transportar por su arte hacia dimensiones extraordinarias. La serie completa está en el canal de Instagram @foscarinilamps.
Cuéntanos algo sobre ti y tu trayectoria como artista. ¿Siempre fuiste consciente de alguna forma de que éste era el camino que querías seguir?
Nací en París en el 1985. De niño me sumergía en el mundo del cómic, leyendo y releyendo la colección familiar de clásicos como Tintín y Astérix. Luego descubrí el cómic de autor a través de revistas como «Metal Hurlant» y «A Suivre». Artistas como Moebius, Tardi, Hugo Pratt, Enki Bilal, Druillet y Comès, con sus extrañas y fascinantes historias, y sus personales e intrincados trazos de tinta en blanco y negro. Mi joven imaginación quedó tan profundamente fascinada que despertó en mí el deseo de convertirme en dibujante de cómics e ilustrador.
Años después, estudié arte en la «Ecole Nationale Supérieure des Arts Décoratifs» de París, centrándome en la división de «imagen impresa». Allí estudié ilustración, grabado, serigrafía, diseño gráfico y también hice mis pinitos en cinematografía. El enfoque multidisciplinar de esta escuela promueve la apertura mental y amplió mis perspectivas. En 2005-2006, tuve el placer de realizar una experiencia de intercambio Erasmus y estudiar Kommunikationsdesign en la Kunsthochschule Berlin-Weissensee, que para mí supuso una experiencia muy valiosa. En 2012 decidí mudarme a Berlín, donde mi familia y yo vivimos desde hace 10 años.
También me enorgullece ser miembro del colectivo de artistas «Ensaders», que fundé con dos compañeros de estudios: Yann Bagot y Nathanaël Mikles. Desde que nos conocimos en 2002, hemos colaborado en la realización de diseños colectivos, hemos organizado talleres y hemos organizado espectáculos.
Tu estilo característico, con trazos de bolígrafo que manipulan hábilmente las sombras y la luz, nos intriga. ¿Cómo describirías tu estilo?
Mi estilo es figurativo, orientado hacia la simplificación y la abstracción de las formas. Contrasto las líneas rectas y puras y los motivos geométricos con las curvas y el caos de los elementos naturales. El paisaje urbano moderno, con su ortogonalidad, contrasta con los mares salvajes o los bosques oscuros. Me gusta combinar los opuestos. El bolígrafo me permite crear detalles intrincados, casi como un grabado, y al mismo tiempo puedo utilizar una regla para dibujar cuadrículas o motivos geométricos con líneas limpias y nítidas. Estos estilos de trazo tan distintos, uniformados con la tinta azul, abren una gama de oportunidades desde un punto de vista gráfico que me encanta explorar.
¿Qué te ha llevado a elegir un bolígrafo como herramienta de elección?
Utilizo bolígrafos porque me gusta dibujar al aire libre y siempre tengo uno a mano. No me gusta llevar encima muchas herramientas y materiales de dibujo. El icónico bolígrafo azul Bic es algo que todo el mundo tiene a mano. Es la herramienta a través de la cual los sueños toman forma mientras garabateo en un trozo de papel. Es el mismo bolígrafo con el que yo garabateaba de niño, rellenando los bordes de mis cuadernos escolares. Cuando hablo por teléfono, lo utilizo para tomar notas y luego, inconscientemente, creo intrincados patrones que se superponen en un post-it. Tenía curiosidad por saber cómo habría podido expresar algo completamente nuevo utilizando una herramienta tan sencilla, creando un universo original con sólo tinta azul.
¿Puedes hablarnos de la importancia del doble escenario azul-blanco en tus ilustraciones surrealistas?
Me fascina el particular color azul del bolígrafo Bic, con su peculiar matiz azul-rojo. Es un azul que puede adquirir una gran intensidad. Puedes cruzar las líneas casi infinitamente para crear matices y profundidad, de forma similar a lo que sucede con la técnica del aguafuerte. En mis ilustraciones, utilizo el blanco del papel como reserva para crear contraste y luminosidad, para realzar la importancia del color azul.
En mi forma de percibir, el azul es un color que está estrechamente relacionado con el mundo de los sueños. Está vinculado con el agua, la noche y el sueño, con ese mundo onírico enraizado en el misterio del inconsciente. El inconsciente se expresa en un lenguaje extraño que podemos intentar traducir a través del arte. En mi opinión, un dibujo, como cualquier obra de arte, es el resultado de la alquimia que se produce entre el consciente y el inconsciente. El azul de los bolígrafos nos resulta tan familiar que se ha convertido en parte integrante de nuestra psique.
¿Cómo describirías tus primeras impresiones sobre las lámparas Foscarini cuando las conociste por primera vez?
Me parecieron bonitas y elegantes. Las formas sencillas pero al mismo tiempo complejas me impresionaron. Más que lámparas, vi historias de luz capaces de suscitar inspiración y estimular las ideas en un ambiente. La luz desempeña un papel importante en mi diseño monocromático y a menudo trabajo el contraste entre zonas claras y oscuras. La belleza de la luz se ve realzada por la fuerza de la oscuridad que la rodea. A menudo recuerdo esta cita de Stanley Kubrick: «Por muy amplia que sea la oscuridad, debemos proporcionar nuestra propia luz».
En esta serie de obras, las lámparas Foscarini forman parte de escenarios oníricos, ayudando a dar vida (y luz) a mundos imaginarios y surrealistas. ¿Puedes hablarnos de cómo surgió la inspiración para esta serie?
Esta serie está íntimamente enraizada en el surrealismo, en los sueños y los cuentos de hadas. Cuando era un niño y pasaba las vacaciones en Bretaña, la tierra natal de mi madre, estaba rodeado de una cultura repleta de leyendas y de extrañas criaturas de la mitología celta. Espíritus, criaturas y hadas animan los páramos y los castillos en ruinas, sugestiones que constituyen la base de mi obra artística.
Me gusta proyectar objetos contemporáneos en realidades surrealistas, donde cosas corrientes como sillas cuadradas, lámparas y modernos suelos de parqué cobran vida, transformándose en extrañas entidades que superan la frontera entre el sueño y la realidad.
Empecé observando la forma abstracta de la lámpara, tratando de imaginar las emociones que podía evocar en mí. A partir de ahí, desarrollé una serie de bocetos, contextualizando la lámpara en diversos escenarios. Durante mi proceso creativo suelo escuchar música, que crea un estado de ánimo específico y a veces genera ideas e inspiraciones inesperadas. Pensé en cómo la lámpara podría asumir el papel de un elemento principal, de un actor, en una historia extraña.
Historias extrañas que recuerdan los cuentos de hadas y que evocan el estilo de Chagall. ¿La obra de Chagall ha influido en su visión artística?
Sí, admiro a Chagall por sus pinturas figurativas y oníricas al mismo tiempo. También me inspira el surrealismo de René Magritte. Podría decir que esta serie de dibujos encarna el espíritu de las películas de Georges Méliès, especialmente «Le Voyage dans la Lune». Es una combinación de cuento de hadas, poesía y surrealismo. El cine también utiliza la luz como medio para crear movimiento e historias. Me interesan mucho los artistas capaces de crear universos y visiones evocadoras, como Alfred Kubin, Odilon Redon y Edward Munch. De niño me encantaban los dibujantes de cómics como Hugo Pratt, Moebius y Roland Topor con su universo extraño, sobre todo en la película de animación «La Planète Sauvage». Me transmitieron el amor por la narración y por el infinito potencial del dibujo.
¿Cuál es tu ilustración favorita de tu serie para «What’s in a lamp?» y por qué?
Me gusta «Nuee» porque me recuerda a «El Principito» de Antoine de Saint-Exupéry, con sus pequeños planetas y las personas que vive en ellos. También «Rituales», porque nos lleva, como en «Alicia en el país de las maravillas», a través del espejo.
Tus ilustraciones muestran una combinación de sencillez y complejidad, donde unos trazos mínimos de bolígrafo allanan el camino a historias fascinantes. ¿Cuál es el papel de la narración en el arte ilustrativo?
Me encanta contar historias y buscar lo extraordinario en lo ordinario. Al principio ero un dibujante de cómics y mi trabajo evolucionó gradualmente hacia la creación de series de dibujos con un fuerte énfasis en la dimensión narrativa. Es como si estos dibujos construyeran juntos una historia, pintando un mundo onírico desconocido. Mi principal objetivo es divertirme y plasmar mis ideas y fantasías sobre el papel.
¿Puedes ilustrarnos tu proceso creativo? ¿Cómo consigues hace florecer las nuevas ideas?
En primer lugar, mientras observo al sujeto, me tomo mi tiempo para garabatear en el papel bocetos al azar y dibujar esbozos con el lápiz. Algunos bocetos son «más sinceros» porque consiguen capturar el dinamismo y el estímulo que necesita el dibujo final. Un boceto es algo fascinante. Sólo con unos trazos, encarna la energía y los elementos esenciales del dibujo final. Sin embargo, siempre estoy abierto a modificar el diseño a medida que lo voy completando. Durante el proceso creativo pueden surgir nuevas ideas.
Busco la inspiración en distintas fuentes, como la lectura, la música y a veces incluso los sueños. Un dibujo suele llevar a menudo a la creación de otro. En una serie de obras, mis dibujos siguen una cierta lógica, a veces conectados a nivel narrativo y a veces contrastando, en cambio, con el trabajo anterior. A veces los dibujos forman incluso «miniseries», como en el caso de la serie sin título «Meditación 1,2,3,…».
La lectura de los libros del psiquiatra Carl Gustav Jung es una fuente de gran interés para mí. Sus estudios sobre el inconsciente y los sueños me fascinan. Su enfoque es profundamente creativo, repleto de ideas y visiones. Toma en consideración numerosas imágenes y símbolos de la historia del arte y de nuestro «inconsciente colectivo». Por ejemplo, ¿qué significan para nosotros figuras como el árbol, el agua o el sol? Su investigación sobre la mitología y los arquetipos es extraordinariamente fascinante.
¿Qué significa para ti el diseño?
Para mí, el diseño es infundir espíritu en la materia. Es el aliento que da vida a la materia prima. Es el acto de llenar los objetos de amor, con la esperanza de que lo reflejen a los ojos de todos. A todos nos gustaría encontrarnos con objetos que tienen alma e historias que contar.